Hay algunas cosas que por más que intentemos olvidarlas
siempre estarán ahí,
en algún lado de nuestras mentes, escondidas, esperando a atacarnos aún a nuestro pesar.
Son cosas con las que debemos convivir cada día,
como lo hacemos con la comida, con la respiración, con la sed y con el hambre.
Aunque, creo, nunca me acostumbraré a esa necesidad que siento cuando el estómago se me vacía y empiezo a sentirme descompuesta porque me falta comida.
No, creo que nunca veré a la comida como algo necesario, y aún así, mi cuerpo se resiste a ese pensamiento.
-Vamos, cuerpo mío, no es para tanto pasar unas horitas sin comer,
unos días sin comer...
Toda la vida sin comer.
Ánimo, me encanta la forma en que te das ánimo a ti misma ¿qué mejor que eso? Así puedes seguir, y claro que puedes, si se puede...
ResponderEliminarBesos
El cuerpo es una maquina, y las maquinas jamas funcionan solas, siempre tiene que haber un equilibrio, piensalo! que las cosas no te superen
ResponderEliminarAdoro tus letras son tan llenas de razón (':
ResponderEliminarEl hambre no se sacia tan solo con comida...