Por vos, me tiré de cabeza a la nada, al abismo, sin saber qué habría abajo o con qué me encontraría.
Sorprendentemente me salieron alas y volé de tu mano.
Y todavía estoy acá, planeando de tu mano, entre la brisa del amor.
Tal vez estamos destinados a ser.
hola que lindo lo que haz escrito
ResponderEliminarsigue escribiendo porque lo haces de maravilla es un don que no todos lo tienen
un beso