Hubo café, hubo una mirada cómplice...
Pero también hubo un "me voy", y la vida se me trizó de repente...

Acá te voy a esperar cuando vuelvas,
acá voy a estar hoy, mañana y siempre para vos.

Te amo, lo sabes.
Me amas, lo sé.


Y después de llorar, sonrió:
mientras mi motivación sea volver a verte,
no importa cuanto tardes en volver.

Siempre tuya...
Siempre acá para vos...

1 comentario:

  1. Holaa Omh!

    Que triste, con lo alegre q estoy.. me largo a llorar de una!

    Cuidatee muchooo!
    Te quieroo
    Bechos

    ResponderEliminar


Son las ideas que caen en mi mente gastada,
que por mis hombros resbalan,
enredadas en mi cabello,
pero no se caen si no que se quedan
en mi pies pegadas,
impidiendo que que me mueva,
que avanze, que salte o que frite.

Son ideas que lastiman, que queman,
pero no puedo vivir sin ellas,
aunque ellas no me dejan vivir.